Cultivo agroforestal

Nuestros cafetales crecen bajo sombra de árboles nativos como el guabo, cedro y canelo. Este sistema no solo mejora la calidad del grano, sino que conserva el suelo, regula el microclima y fomenta la biodiversidad.

Cada cereza es cosechada a mano en su punto óptimo de madurez. Luego se seleccionan y fermentan en tanques ecológicos con mínimo uso de agua, preservando aromas y evitando residuos contaminantes.

Utilizamos maquinaria no industrial para lograr un tostado uniforme y balanceado, en pequeños lotes, lo que nos permite resaltar las características sensoriales únicas del café amazónico. El proceso es controlado cuidadosamente para obtener un perfil de sabor consistente, sin perder la identidad del grano.